El dia que nunca debio llegar

Posted: martes, enero 6 by Pequeño Bastardo in
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25 de Diciembre, 01:25 a.m.

Marcelino espera impaciente la llegada de Santa Claus. Ha estado contando los días desde que sus padres le han dicho que el señor regordete vestido de rojo visitaría su hogar.
Durante varios días no hace mas que presumir ante sus compañeritos del colegio; y claro, no es para menos: Santa en persona estaría en su casa para llevarle sus obsequios.

Se ha esmerado en la elaboración de su carta navideña ya que la T.V. ha invadido su mente con regalos por doquier, de todos los tamaños y colores. El sueña con una bicicleta roja con franjas blancas. La ansía demasiado.

Ha sido un niño obediente y disciplinado con papá y mamá. Ayuda en las labores de la casa y de igual forma le 'echa una mano' a su padre en el taller de articulos electrodomesticos.
A sus 7 años, Marcelino es un niño con la mente muy abierta. Es muy centrado al hablar y educado al hacer algún comentario hacia sus mayores.

Sus padres están orgullosos de él. Lo han criado como un principe, pues Marcelino es hijo único.

El día 24 se levanta de un salto de la cama y corre a donde esta su madre preparando el desayuno.

- Mami!!! Es hoy verdad? Es hoy?

Y la madre con una sonrisa en el rostro, le acaricia el cabello y le responde:

- Si mi amor, hoy en la noche recibiremos a Santa Claus.

Marcelino no cabe dentro de sí mismo de la emoción. Está entusiasmado con la idea de su bicicleta nueva y ya quiere que llegue la Nochebuena.
Siempre se ha preguntado como sería conocer a Santa; y se ha propuesto no dormir hasta verlo entrar a su casa y dejarle sus regalos.

El sueño empieza a vencer a Marcelino. Los ojitos se le hacen pesados y los bostezos se hacen mas frecuentes. Se despierta de repente y corre a lavarse la cara para mantener los ojos bien abiertos. Entre sueños Marcelino observa su bicicleta, es roja y tiene unas franjas blancas a los costados. Minutos mas tarde, se ha quedado dormido, pero con la sonrisa dibujada en la cara.

Un destello fugaz ilumina toda la habitación del pequeño. Abre los ojos de manera abrupta, pero la luz es tan radiante que no le permite ver muy bien a su alrededor.

Quiere llamar a sus padres con un grito de emoción, pero el alarido se vuelve desgarrador. Su piel es devorada por las llamas en fracción de segundos.

El ejército israelí ha lanzado un ataque con misíles al sur de Gaza. Se ha desatado una nueva guerra. La casa de Marcelino ha sido convertida en ruinas. Una cortina de humo cubre el cielo.

7 cuerpos yacen sin vida entre rocas y escombro, entre ellos el pequeño Marcelino... y a unos metros de él, una bicicleta roja con franjas blancas.

6 recuerditos:

  1. =O
    Esos sin son bastardos y unos HDP :/
    Triste...pero cierto...
    Bueno...tenía que haber un momento de reflexión en el blog del pequeño bastardo ;)

  1. Anónimo says:

    Es verdad... al principio pensé que era un relato sacado de La rosa de Guadalupe ... pero el final estuvo bueno y más real
    Saludos a mis fans

  1. Anónimo says:

    Wilo dijo...
    Pues, como es que no le paso nada a la bicicleta?

  1. Anónimo says:

    verdes!! creí que me daría risa el final!

    chaz!! feo pero real!

    pero chiiiiiiido chucheeeeeee
    ah perdon..
    CALINEEEEEEEEEEE!!!

  1. Anónimo says:

    Conmocionante pero..... mmmm.... tu relato me llega al alma y solo puedo pensar en una cosa.............................Pinche suerte Kgada de los Mexicanos!!!
    pk MARCELINO no mams!!! de seguro era mexicano ese cabron pk dudo ke un palestino se llame MARCELINO pa mi ke te confundiste y esa madre fue SANJUANICO y fue con la fuga de PEMEX.

  1. Sabes anonimo, estás en lo cierto, Marcelino era un niño mexicano, pero se habia ido de Intercambio Estudiantil en su colegio.

    Ya luego sus viejos lo alcanzaron ahi.

    Y sí, como bien dices, que puta suerte de mierda del pobre Marcelino.